La elección del bolso de piel puede depender de muchas cosas pero una de ellas es tu personalidad y no me refiero con esto a que según tu forma de ser el bolso debe tener un color u otro sino a su confección, tamaño y estructura. Así que vamos a la pregunta
¿Qué tipo de persona eres? Eres controladora, te gusta acceder a todo fácilmente, odias no encontrar rápidamente lo que buscas o eres de las personas que debe llevar consigo absolutamente todo.
Dependiendo de cómo eres así debe ser tu bolso.
Mi bolso, mi tesoro
Si eres de las personas que quiere su bolso como si fuese de oro en paño y simplemente está enamorada de él y no quiere dejarlo en ningún momento. Lo mejor es un bolso mediano en el que puedas llevar lo imprescindible y aún tengas espacio para alguna cosa más que desees llevar.
No toques nada que lo tengo todo ordenado
Si necesitas tener en tu cabeza grabada la estructura de tu bolso y qué tienes en cada pequeño bolsillo o compartimento. Un bolso que esté bien estructurado y que contenga infinidad de huecos en los que introducir ese pequeño objeto que merece y solo puede estar ahí.
Por si las moscas
Si necesitas llevar en todo momento cualquier cosa que se te pase por la cabeza y que puede que lo necesites o puede que no pero mejor tenerlo en el bolso tanto hoy como mañana como igual siempre.
Un bolso extragrande es lo tuyo. Sí, será pesado pero es mejor eso que encontrarte en esa situación donde hubieses necesitado eso que has dejado por no tener espacio suficiente.
Lo mínimo de lo mínimo
Claramente, un clutch es lo tuyo. El documento de identidad, billetes y a vivir el mundo. Además estos bolsos son muy fáciles de mantener limpios y no te cansarás de él por lo que es una sabia elección.
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